LA FRANQUICIA es un contrato entre dos partes, una persona física o jurídica (FRANQUICIADOR) y otra persona física o jurídica (FRANQUICIADO), mediante el cual el primero cede al segundo el derecho a la explotación de un sistema propio de comercialización de productos o servicios.
El franquiciador entrega una marca y un producto cuyo reconocimiento dependerá del grado de implantación de la franquicia, pero además, va a transmitir al franquiciado toda la experiencia y su buen saber hacer (Know How), enseñándole paso a paso a explotar y dirigir el negocio mediante cursos de formación.
A cambio el franquiciado le entrega:
• Canon de entrada: cantidad por formar parte de la franquicia (inferior al 10% inversión).
• Royaltys: importe periódico entre un 2 y 6% de la facturación. Es la principal fuente de ingresos de la franquicia como consecuencia del continuo asesoramiento.
• Canon de publicidad: cantidad fija o variable que se emplea para la promoción.
Clic@ en las siguientes páginas y encontrarás información muy detallada sobre un sistema de negocio consolidado, que resiste muy bien en tiempos de crisis, con capacidad de seguir creando puestos de trabajo y sobre todo, muy efectivo como fórmula de Autoempleo.